1999
Entramos en el último año del milenio. El país sumergido en 'que pasará cuando llegemos al 31 de Diciember de 1999'. Unos dicen que se acabará el mundo, otros que los ordenadores no funcionarán, los aviones dejarán de funcionar en pleno vuelo y se caerán, en fin, hemos oído de todo en el 98, ahora supongo que en el 99, mucho más todavia. Nuestro Ayuntamiento tiene incluso ahora un departamento llamado 'Year 2000 Compliance', algo así como 'Efecto 2000' o el 'Bug del Milenio'. Todavía quedan 12 meses. El tiempo lo dirá.
Volví de España el Domingo 3 de Enero y así el 4 ya estaba preparado para ir a currar y ver si me encontraba por la calle con el tipo ése. Y así ocurrió, un sonrisa, diez pasos obligatorios y un giro de cabeza, ya lo sabíamos de memoria. Vuelta a la rutina. Me pregunto si esto va a seguir así el año entero? - Algún día acabará digo yo! - Caty en el curro me dice que estamos perdiendo el tiempo. Y bueno, yo pienso que tiene razón. Al día siguiente, me dió Caty una nota en la que decía algo así como 'Tenemos que para esto. Mañana quedamos en la cafetería de la esquina y tomamos un café. A la misma hora'. Hasta me la plastificó y todo y me la metió en un sobrecito para que al día siguiente se la diera al tipo y ver qué pasaba. Un día me lo encontre en la estación de tren, salía de una cafetería con otro tío. Tenían un café 'para llevar' en la mano. Me vió y se puso 'colorao' como un tomate. Yo tampoco pensé nada, supuse que sería un compañero de su oficina. A los dos o tres dias me lo encontré saliendo del metro, al menos ahora sé que coje el metro y no el tren. Debe de vivir en Londres y va en metro a la oficina.
Curiosamente en 8 meses, sólo le vi una vez haciendo el recorrido contrario, es decir, de la oficina al metro, pero porque ese día salí antes y para cuando llegaba a casa eran como pasadas las cinco, y en Londres generalmente se sale de la oficina a las 5, pero claro, para estar yo allí para las cinco, tendría que salir a las cuatro, y casi nunca salía a esas horas, generalmente acababa entre las 4.30 y las 5 de la tarde (aunque entraba antes a currar, pero prefería guardame horas que salir antes).
Bueno... la tarjetita en cuestión estuvo en mi mochila el mes entero de Enero. Pero la rutina seguía ahí. Algún dia no lo ví. 'A lo mejor está malo'. 'A lo mejor ha perdido el metro, o el tren'. A lo mejor esto y a lo mejor lo otro. A lo mejor ha cambiado de trabajo y ya no lo veo más. En fin. Supongo que él tambien pensaría lo mismo los dias que yo no iba a currar, pues cada 3 o 4 semanas me cojía un dia libre.
En Febrero, ví un anuncio para un curro en el Ayuntamiento de mi barrio (Camden) y me vendría muy bien, en Londres se cobra mucho más pues la vida es más cara y el transporte en general, así que te dan una especie de 'ayuda' ya integrada en tu salario de unos 3000 euros más. Si me dieran el curro, podría ir andando desde casa de Lucy, aunque no quiero vivir con Lucy mucho tiempo más, pero si me dieran el curro podría buscarme un piso para mí sólo aunque en Londres y más aún en Camden, sería muy caro, pero bueno, el caso es esperar y ver como ocurren las cosas.
El 5 de Febrero, salí de casa rumbo a la estación de tren, y no sé cómo ni porqué, de pronto saqué el sobrecito con la tarjeta de Caty y me puse delante del tipo y se la dí. Y me fuí al tren. Pheewwwww!!! Ocho meses después! - Aunque soy idiota porque es Viernes y hasta el Lunes no sabré nada. Y encima en la tarjeta ponía 'Mañana quedamos en la cafetería de la esquina y tomamos un café. A la misma hora'. No curramos los fines de semana. Que hago? Me levanto y me voy a la cafetería a esperar a ver si viene? Tú creen que vendrá un Sábado? A lo mejor vive en el quinto pino.
Se lo dije a Caty y se puso muy contenta, y salimos a celebrarlo y todo, bueno, en realidad, era Viernes, y los Viernes comíamos en el pub. Al final decidí que no me iba a levantar a las tantas para que luego no se presentara en la cafetería (menos mal, pues a la vuelta ese mismo día, pasé por la cafetería y ví que los Sábados abrían a las 10 de la mañana y los Domingos cerraban. Es una zona muy concurrida con oficinas generalmente, asi que los dias diarios hay miles (sino millones) de personas en esa zona pero los fines de semana como no se trabaja, apenas hay gente en la zona.
El fín de semana no fué nada bueno pues no hice más que darle vueltas a la cabeza, vaya corte que me va a dar el Lunes. Y así fué. El Lunes salí de casa y en vez de ir por donde siempre, me metí por otra calle para darle esquinazo, pues me daba corte. El 99% de las veces nos topamos el uno con el otro en la calle (Euston Road), así que cuando llegué a la estación, respiré tranquilo. Que agusto me he quedado! - Aunque me daba cosa, pues a lo mejor el tío estaba esperando en la puerta de la cafetería y yo como un tonto, no me he presentado. Debería volver para atrás! - pero tambien me dió por pensar que a lo mejor el tío pasaba un huevo de la nota y de mí y también me daría esquinazo.
Justo que voy hacia los andenes del tren, paso por la boca del metro (que está en la misma estación) y me encuentro con él saliendo del metro, y sin más ni más me dice 'oh! Menos mal, pues he perdido el metro de siempre y pense que no llegaba a tiempo para verte hoy, dos segundos más y hubieras pasado de largo!). Ay!! Si supieras que he venido por otra calle para no encontrarme contigo.... pero no le dije eso. Me hice el tonto. Me dijo que en vez de ir a la cafetería de la esquina podíamos ir a la que está en la estación (estaba justo al lado) pues el café estaba mejor allí y yo dije que sí.
Y nada, allí en la mesa y en torno al café me dijo que se llamaba Ian y que estaba hasta las narices de entrar a currar casi a las 8 en vez de las 9 de la mañana! - Me quedé pasmado, pues era lo mismo que estaba haciendo yo! Lo que nos pudimos reir! Así que estuvimos charlando un rato, aunque a él le quedaba la oficina a 5 minutos de la cafetería, pero a mí me quedaba a 30 minutos pues tenía que cojer el tren.
Curiosamente Ian no vive en Londres, sino en Kent, y desde allí coje el tren a las 7 de la mañana, y llega a Charing Cross a las 7.35 y luego coje el metro hasta Euston, si todo va bien y nada sale con retraso, quiere decir que alrededor de las 7.58 y 8.02 se encuentra conmigo en algún punto de la calle, pero como el tren llegue un minuto más tarde o el metro salga con un minuto de retraso, entonces ya no me vé. El tambien, al igual que yo, de vez en cuando iba a la oficina una hora antes para hacer algun papeleo urgente, y curiosamente le primer dia que nos vimos, allá por Junio, es lo que hizo, levantarse más temprano, sino, no nos hubieramos visto nunca. Destino! - Aunque claro, después de vernos casi todos los dias a la misma hora, daba la impresión de que nos conocíamos de hace años, y la conversación en la cafetería fué muy amena, a las 8.30 me fuí a cojer el tren, antes de eso, Ian me dió un sobre y me dijo que lo leyera en el tren.
Una carta de varios folios, contándome sus experiencias con el tema, cuando pensaba que yo habría cambiado de trabajo o de oficina, porque en Agosto no me vió durante dos semanas, o lo qué pensaría cuando le ví salir de la cafetería con otro hombre, y que los fines de semana eran amargos y quería que llegara el Lunes para poder ir a currar y así vernos por el camino, vamos, que podría haber escrito yo la carta.
Al llegar al curro, Caty estaba en la calle, sabía de sobra que al final me había encontrado con él, pues de no ser así, habría llegado a la oficina una hora antes! - Le conté todo e incluso le enseñe la carta y se puso a llorar! (de alegría supongo!).
A partir de ese día, todos los dias a las 8 quedabamos en la cafetería, hasta las 8.30 tomando un cafe y contándonos nuestras vidas, bueno, todos los días no. Sólamente todos los dias de esa semana, pues el dia de San Valentín (era Domingo y salimos a cenar juntos y se quedó en mi casa a dormir), me dijo que me fuera a vivir a su casa. Y eso hice. Nueve dias después. Pensamos que ya habíamos perdido suficiente tiempo cruzándonos en la calle como para perder más. Estábamos seguros de que todo iría bien y eso hicimos. Su cuñado tenía una furgoneta (era fontanero), así que un fin de semana, fuimos a Londres, desde Kent y cojí todas mis cosas y me fuí a vivir a Kent sin pensarmelo dos veces.
Vivir en el Condado de Kent y trabajar en el Condado de Hertfordshire es un poco de 'locos'. Pues tenía que levantarme a las 6.00 de la mañana, cojer el tren de las 7:00 (me gusta desayunar en plan tranquilo y ducharme y luego había que andar como 15 minutos a la estación de tren desde nuestra casa), y llegar a Charing Cross a las 7.35, meterme en el metro e ir hasta Euston y allí cojer otro tren hasta Watford y andar hasta el curro, así que me tiraba dos horas para ir y otras dos horas para volver. Cuatro horas diarias de trenes y metros para ir a currar!
Aunque lo llevaba bien, pues Ian venía conmigo por las mañanas y así parábamos en la cafetería a tomar un cafe y sobre las 8:30 me iba para Watford.
Apenas tenía amistad con la gente de Watford, pues como no vivía allí, y no tenía móvil y además nadie sabía donde vivía en Londres, pues no estaba en contacto con nadie, a no ser que me encontrara con alguien a la hora de comer, pero no solía ocurrir. Además estaba seguro que no iba a estar mucho tiempo allí pues eso de pasarme 4 horas al dia viajando, no me hacía mucha gracia y además era muy caro, así que estuve buscando otro curro como loco.
Cumple Ian - 30 Marzo 1999 |
En Marzo fué el cumple de Ian he hicimos una fiesta y de esa forma conocería a sus amigos y familia, lo cual no me hacía mucha gracia, este tipo de cosas no me gustan, eso de conocer a mogollón de gente de golpe y porrazo y encima la familia. Además la mayoría ya me conocían pues Ian había contado la historia no sólo a su familia y amigos, también a la gente del trabajo, que al final nadie se creía que por fín nos habíamos conocido después de tanto tiempo.
La fiesta fué muy bien, yo invité a Lola y Julian, y la hermana de Lola, que llevaba un tiempo en Londres tratando de aprender inglés. Ian invitó a sus amigos más intimos, lo pasamos bien, su hermana es muy guapa, tiene su propio salón de belleza, masajes, peluquería, etc. Su madre es Belga, pero lleva muchos años en Inglaterra y se casó con un inglés (su padre, claro está), que no le hacía mucha gracia el asunto y no acababa de entender que su hijo fuera gay, no vino a la fiesta, como siempre, apenas tiene trato con Ian, sólo se ven si Ian va a casa de sus padres, pues el tío no hace un esfuerzo para venir a la nuestra.
Ian se acababa de comprar una casa, de 3 plantas, con jardin y garaje, era muy vieja y estaba restaurandola poco a poco, muy poco a poco, pues no tenía pelas y estaba que parecía que habían puesto una bomba. Trabajaba para el Barclays (banco) en el departamento de fraudes, y aunque era un buen trabajo, tampoco es que cobrara mucho, además la hipoteca, el coche, las facturas y la comida se llevaba casi todo el salario, así que iba muy despacio con las obras de la casa.
En Junio, me llamaron para una entrevista en el Ayuntamiento de Camden, no me acordaba de ello, pues había mandado una solicitud junto a mi CV en Enero o Febrero, y me sorprende que me llamen ahora en Junio, para una entrevista, así que llamé al departamento de recursos humanos y me dijeron que era el mismo trabajo que yo había pedido, sólo que al final tuvieron que parar el proceso porque había problemas y que ya solucionados, se ponían en marcha otra vez.
Me presenté a la entrevista sin saber qué trabajo era, pues había roto todo lo referente al tema pues si rellenos solicitudes y demás para un trabajo y en un par de meses no me han mandado nada, pues rompo todo, mejor que tenerlo guardado para nada. La entrevista fué muy bien, una de las personas que había en el panel de entrevistadores (4), había vivido y trabajado en Watford, y la otra, Jill, me cayó muy bien, después de la entrevista me llevó a una azotea y nos fumamos un cigarro, me dijo que su familia vivía en Málaga y que le gustaba mucho España y que estaba aprendiendo a hablar español, y poco más.
Al dia siguiente mientras estaba en la oficina en Watford, me llamaron del otro Ayuntamiento para ofrecerme el trabajo, y tendría que dar un mes de aviso en este Ayuntamiento antes de abandonarlos, por una parte me puse muy contento, pues eso significa que acorto mi viaje casi 50 minutos ida y 50 minutos vuelta, y me ahorraría dinero en transporte. Podría dormir casi una hora más todos los dias y llegar a casa casi una hora antes! Y encima tendría mejor sueldo en Londres.
Por otra parte, me daba pena dejar a la gente, despues de 3 años trabajando con ellos. No dije nada a ningún amigo, para entonces, la verdad es que aunque la gente tenía mi dirección del trabajo y teléfono, nadie me llamaba, ni se molestaba en verme, así que en el trabajo me hicieron una fiesta de despedida y nos fuimos todos al pub de enfrente a emborracharnos, que es lo que se suele hacer, se portaron muy bien, hicieron una colecta y canjearon el dinero por 'vales' para comprar en una tienda donde hay un poco de todo. No sé si algún día volveré a Watford, aparte de en Septiembre, que tengo que venir a la boda de Pam, una compi del trabajo, y a lo mejor para ver a Caty, pero casi prefiero juntarnos en Londres, antes que tener que ir a Watford. Me fui con pena pero al mismo tiempo contento de cerrar un capítulo más de mi vida. Y empezar otro.
La verdad es que estoy muy contento, todo va bien en mi nuevo curro, es un trabajo diferente, en Servicios Sociales, estoy en el departamento de atención primaria y salud mental, tengo 3 residencias de ancianos a mi cargo y 3 centros de día, tengo que llevar todo los papeleos de esos 6 centros, la contabilidad generalmente. Hay muchísimo trabajo. Y somos bastantes personas allí, parecen todos muy majos.
En la entrevista me dijeron que de empezar, sería el 26 de Julio, y curiosamente yo tenía ya reservadas mis vacaciones de Agosto, nos ibamos a España, Ian y yo. No pensé que me llamarían de un trabajo pedido en Enero o Febrero, pero el panel de entrevistadores lo entendió, y me dijeron que aunque fuera una semana y luego me fuera de vacaciones tres semanas, que no pasaba nada.
Ion y yo - Donosti 1999 |
Ian in Pamplona 1999 |
En realidad, no me iba 3 semanas de vacaciones, sino 2. Lo que pasa es que mis hermanas habían decidido venir a Londres solas, una semana y luego nos iríamos todos juntos en Agosto. Y eso hicimos, lo pasamos bien haciendo turismo, yendo a los sitios típicos y luego nos fuimos todos juntos a Pamplona dos semanas. No tengo ninguna foto de ésos dias, supongo que mis hermanas sacarían fotos pero no me dieron ninguna.
Antes |
Después |
En Septiembre, decidimos cambiar la hipoteca de Ian, y la pusimos a nombre de los dos, porque de esa forma, estaríamos más desahogados con los pagos y podríamos ir haciendo las obras, y eso hicimos, contratamos un albañil (amigo de Ian, retirado) que se encargó de enyesar todas las paredes de la casa y todos los techos, estuvo 2 meses y luego lo dejamos secar, pintamos el comedor azul, la cocina roja, una habitacion verde, otra naranja y otra avocado. El baño lo hicimos más grande tirando un tabique, y pusimos una ducha y tambien la bañera aparte, fuimos a un 'trapero' de los que abundan por aqui, y compramos una bañera de 4 patas, más vieja que la patata, y destrozada, la llevamos a un especilista para que le dieran capas de enamel y la bañera quedó como nueva, las patas super relucientes y nos gustó tanto que volvimos al 'trapero' para comprar un retrete, la cisterna y el lavabo, también super viejo, de la époco Victoriana, y también lo llevamos a que les dieran el enamel, se dice 'enamel', o estoy escribiendo en inglés pensando que en castellano también se dice así?
Pusimos el suelo de Amtico, en el baño, y yo me dediqué a alicatarlo, maldita la hora, me pegué varios dias, pues encima compramos baldosines de mosaicos, que aparte de carísimos, se ponían muy mal y la verdad es que acabé harto, pero el resultado final fué escandaloso, nos quedó todo divino, aunque el dinero se iba acabando y decidimos parar, pues lo esencial ya estaba hecho, sólo nos quedaba cambiar todas las puertas de la casa y poner el suelo de madera en los pasillos y escaleras.
En el trabajo todo muy bien, estaba encantado, una vez a la semana tenía que salir a visitar mis residencias y centros de dia, donde el personal me trataba de maravilla, como había que trabajar con traje, la gente me tenía respeto y se notaba cuando tenía que ir a los centros a hacer reuniones con el personal.
Cada centro o residencia tiene su propio departamente de administración y finanzas, y yo me tenía que encargar de que todo el papeleo del centro fuera correcto, y de que hicieran las cosas bien, en orden y todo puesto al día, luego al final del día me llevaba todo a mi oficina y allí seguía yo con el tema, generalmente me pasaba las 8 horas en el centro, me daban de comer allí, comíamos juntos con los ancianos, y fué una época muy buena laboralmente, pues aprendí mucho en esos años. Mis jefes estaban muy contentos conmigo y yo con ellos, así que no me podía quejar.
Jugando al Trivial Pursuit 1999 |
Lola y Julian seguían viniendo de vez en cuando a nuestra casa y nosotros a la suya, el resto de la gente, prácticamente ha desaparecido. De la gente de Watford no sé nada. Ana se cambió de casa y de móvil y nunca supe donde fué a parar, Amaia y Gianni seguían juntos pero Gianni había encontrado otro trabajo y se habían marchado de Watford.
Ian y yo volvimos a Watford para la boda de Pam, y de paso vimos a casi todos los compañeros de trabajo y por fín Caty pudo conocer en persona a Ian, lo pasamos bien. Curiosamente en la boda había una chica que resultó ser prima del novio y que era amiga de Susana, y por lo visto me vió en la boda, pero yo no sé quien era, no me fijé mucho.
Susana, enfadada conmigo por hacer cosas como irme a celebrar mi cumple a Londres con Ana, o por irme a vivir a Londres sin decirle nada, o por tener mi vida propia y pasar de ella, o por ir a la boda de Pam y no decirla que estábamos en Watford, se había distanciado de mí, no sin antes, irle a Reme con comentarios de que si Jose dice esto o Jose dice lo otro, y claro, Reme como una tonta, se lo creyó todo y me vino un día echándome las cosas en cara, cuando ella sabía que yo era la única persona que le hacía caso, vamos, que me pillé un rebote de que se hubiera creído las habladurías que me enfadé con ella, pensé que se me pasaría el enfado, pero luego al irme a vivir con Ian y con mi nuevo trabajo y demás, me olvidé por completo de Watford y su gente.
Me pregunto si algún dia volveré a vivir o trabajar en Watford, esperemos que nó, pues he quedado bastante hartito de todo. Pero nunca se sabe, cuando me fui de Watford en 1990 nunca me imaginé que volvería en 1997.
En Septiembre Mariví tuvo una hija, la han puesto de nombre Sibidou (Sibi de corto), ya que Martin is de Burkina Faso, un país del Africa occidental. Y cuando bajé a Bilbao por Nochebuena, quedé con Mariví para que me 'presentara' a su hija en la estación de autobuses de Bilbao, ya que iba con el tiempo justo, y es muy chiquitina y graciosa, ya tiene 3 meses, también vino su hermana Ana, estuvimos un par de horas juntos y luego me fuí en el autobús a Pamplona.
En Septiembre Mariví tuvo una hija, la han puesto de nombre Sibidou (Sibi de corto), ya que Martin is de Burkina Faso, un país del Africa occidental. Y cuando bajé a Bilbao por Nochebuena, quedé con Mariví para que me 'presentara' a su hija en la estación de autobuses de Bilbao, ya que iba con el tiempo justo, y es muy chiquitina y graciosa, ya tiene 3 meses, también vino su hermana Ana, estuvimos un par de horas juntos y luego me fuí en el autobús a Pamplona.
La última cena del siglo XX |
En Navidades, como ya he dicho antes, yo me fuí a España por Nochebuena, pues Ian se iba a pasar la Nochebuena a Bélgica con su familia, y luego volví para pasar la Nochevieja y entrar en el nuevo milenio con Ian. Ni siquiera hicimos fiesta, ni salimos al Big Ben. Estuvimos solitos en casa, con una buena cena y un película. Para qué más?! Dos dias antes de Nochevieja, vino Chris a visitarnos, nos llevábamos bien y de vez en cuando nos veíamos, aunque no mucho pues él se había ido de York y ahora estaba en otro buen colegio en Birmingham, pero seguía buscando otro trabajo, yo creo que se aburre enseguida de estar en el mismo sitio haciendo lo mismo todo el tiempo. Y eso, escribiré mas en el próximo siglo. Adiós Siglo XX y Hola Siglo XXI.